No soy lo que buscas, no soy rubia y no me gusta el Martini con hielo. No soy alta, en realidad ni siquiera llego al metro setenta, aunque con tacones altos lo sobrepaso. Lloro demasiado, pero soy tan divertida en ocasiones que te dolerá cada centímetro del cuerpo de tanto reírte. No me río muy a menudo la verdad, pero tengo una risa tan vital que cuando la oigas estarás siempre al acecho para oírla otra vez. Soy incapaz de estarme quieta, hablo demasiado y me enfado muy deprisa, aunque se me pasa muy rápido, también. Lo que puedo prometerte es que no te aburrirás conmigo, te volveré loco y querrás salir corriendo de lo pesada que me pongo a veces. También te darás cuenta, con el tiempo, de que soy algo caprichosa y un poco coqueta también. Canto en la ducha y escribiré tu nombre en la arena todos los veranos. No te prometo que nos vaya bien, pero pondré toda mi alma en que lo nuestro funcione...

Desde el momento en que te vi sé a lo que voy

-Dejemoslo en manos de la suerte
+ Llevas semanas persiguiéndome y ahora dices que lo dejas en manos de la suerte...
-¿ Sabes esos bombos enormes de la lotería? Pues imagínate que llenamos uno con un millón de bolas con los nombres de todos los hombres del mundo ¿Vale? Pues estoy segura de que si metiera la mano en ese bombo sacaría tu nombre, aunque me empeñara en sacar otro, aunque metiera nombres repetidos para hacer trampa, sacaría el tuyo, y eso es lo que yo entiendo por suerte

Ella no es una amiga más, es ESA amiga. La que muchos querrían tener, esa que tiene fallos, como todos, pero también es esa en la cual sus cosas buenas siempre ganarán a las malas. Es esa persona que tiene una sonrisa en la cara siempre que lo necesitas. Es esa persona que cuando tienes un mal día ella tiene un abrazo para ti. Es esa persona que por mucho que hagas va a seguir a tu lado. Esa que cuando no quieres hacer nada te dice “pues voy yo a tu casa, total, a mi tampoco me apetece”. Es esa persona que aunque probablemente preferiría estar en cualquier otra parte, escucha tus penas. Es la pequeña que tiene palabras de ánimo para ti, TODOS los días, sin excepción eh!.

Y sobre todo, si algo quiero destacar es que es ESA PERSONA que pase lo que pase me va a tener siempre que lo necesite

Los días son más cortos cuando tienes una buena compañía

Vuelve el mal a quien hace el mal

QUIERO LLEVARTE HASTA EL CIELO

Ella es de esas personas que aparecen como de la nada cuando de verdad la necesitas, de esas que siempre tienen una sonrisa en la cara para ti, la que te ayuda siempre aunque no se lo pidas, es una de esas personas que aunque no hables con ella todos los días de verdad te aprecia y sabe quién eres realmente, de las que no sabrá cosas como el color favorito pero sabe perfectamente cuando te sientes realmente mal y cuando intentas parecer fuerte para no ponerte a llorar. Es una de esas personas que nunca te dejan sola cuando algo te duele de verdad, de esas que siempre te anima sin saber que lo está haciendo. De esas personas a las que quiero mucho, muchísimo, sólo por el hecho de ser, de estar y de quedarse a mi lado.

Ser amiga de la persona que te rompió el corazón, no solo es imposible, sino que también es autodestructivo

Yo elegí quererte y todas las consecuencias que eso conllevaba, elegí que tu fueses la persona que llenase mis días de sonrisas, yo elegí que me comieras a besos, elegí también tu voz al otro lado del teléfono. Elegí llorar por ti de vez en cuando, elegí creerme tus verdades y creerme a medias tus mentiras, elegí que no quería otros abrazos, que no quería otras manos agarradas a las mías. Elegí las idas y venidas, las despedidas, elegí la impotencia, la incertidumbre y tu impredecibilidad, elegí el miedo a fallar y los impulsos, elegí las miradas, elegí temblar, elegí hacerme adicta a sus palabras, al corte de tu voz. Elegí conservar intacto cada momento, y dejar huella de lo que algún día fue. Elegí no callarme nada, elegí darte todo, elegí hablar de nosotros cuando hablaba de ti, elegí ser fuerte sin la ayuda de ningún tipo de coraza y luchar por un solo motivo, elegí darte todas mis oportunidades, elegí quedarme con tus manías, tus defectos y tus carencias. Elegí el sabor agridulce de las discusiones que acababan en abrazo, elegí derrumbarme cuando ya no aguantaba más, elegí seguir queriéndote aún cuando ya no estabas. Elegí arriesgar y jugármela por ti. Y no me arrepiento de nada.

Me alegro de verte de nuevo, dime cuánto tiempo ha pasado desde que estuviste aquí. Te veo tan distinto a como eras antes. Tal vez sea el viento helado, un escalofrío de la cuenca del Pacífico la que te trajo de esta manera. No me hagas pensar en ella, la forma en que tocó tu piel frágil, eso me caza todos los días. Estoy fuera del amor, pero no puedo olvidar el pasado. Estoy fuera de tus palabras, pero estoy segura de que esto no va a durar 

SONRÍE, son sólo seis letras y unos pocos músculos que mover

Me río yo de los que aún creen en el amor

LO MEJOR DE MI VIDA SON ELLAS

"Para decir yo te amo, primero hay que saber decir Yo"

Ayn Rand afirmaba que la verdadera libertad empezaba en el individuo, en uno mismo. Esta frase es la base de lo que AYN Rand denominaba el Egoísmo Razonable, la necesidad de pensar de vez en cuando en uno mismo para conseguir el equilibrio personal. La necesidad de hacerte valer, para que los demás te valoren, de tener la valentía de mostrar tus sentimientos sin juzgar y sin miedo a ser juzgado. De defender como de verdad es uno por encima de lo que piensen los demás, la necesidad de ser simplemente feliz sin dar explicaciones a nadie, sean cuales sean las consecuencias

El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una pero aunque se parezcan los miedos son tan personales y tan diferentes como pueden serlo todas las familias del mundo. Hay miedo tan simples como a desnudarse ante un extraño, miedos con los que uno aprende a ir conviviendo, hay miedos hechos de inseguridades, miedo a quedarnos detrás, miedo a no ser lo que soñamos, a no dar la talla, miedo a que nadie entienda lo que queremos ser, hay miedos que nos va dejando la conciencia, el miedo a sentirnos culpable de lo que les pasa a los demás, y también el miedo a lo que no queremos sentir, a lo que no queremos mirar, a lo desconocido, el miedo a la muerte, a que alguien a quien queremos desaparezca...

Mírame, soy feliz, no puedes hacer nada para evitarlo. Ya no puedes venir y hacer que todo vuelva al pasado, no puedes recuperar ni un solo segundo perdido, ya no. No puedes convencerme de que la decisión que estoy tomando es la incorrecta, ni puedes hacer que cambie de opinión, ya no. No puedes conseguir que vuelva a preocuparme por lo que haces, por lo que dejas de hacer, ya no. No puedes hacer nada a tu favor, ESTÁS PERDIDO.

HAS DEJADO DE DOLER

Aquí ahora estás, hablando de amar.